Comida salvadoreña (la mejor)

Pupusas:


Las pupusas con una comida tradicional en todo El Salvador, en cualquier parte del país pueden encontrar un lugar donde vendan pupusas (pupusería), cualquier día de la semana. Las pupusas originalmente son hechas con masa de maíz y rellenas con chicharrón y queso, cocidas en una plancha y servidas con curtido de vinagre. Hoy hay una gran variedad de pupusas y no solamente de maíz sino también de arroz que son conocidas como de olocuilta por su origen. Éstas, independientemente de la masa, el relleno puede ser de chicharrón, de queso, de frijol molido con queso, revueltas (chicharrón, queso y frijol molido), queso con loroco, y una gran variedad de ingredientes que actualmente se encuentran en todas las pupuserias del país.

 

Tamales:


Los tamales son masa envuelta en hojas de plátano, o de mazorca de maíz, dependiendo su tipo. Los tamales pueden ser de gallina o de pollo, donde la masa es de especial cuidado porque le da el sabor al tamal, y se le rellena con gallina o pollo y además se le puede agregar garbanzos y papas en trocitos. Además de este tipo de tamal están los de elote que no tienen relleno sino solamente la masa que es elaborada con granos de maíz molido, mantequilla y sal, y también son conocidos los tamales pishques, span> que son preparados con masa de maíz junto con frijoles molidos, pero la masa debe agregársele bastante cal, para que de el sabor conocido como pishque. Los tamales pishques y los de gallina se envuelven en hojas de plátano a diferencia de los de elote que se envuelven en hojas de la mazorca del maíz.

Enchiladas


Las enchiladas en El Salvador se hacen con masa de maíz y se les agrega achiote y mantequilla y se fríen. Se sirven con pollo, curtido, huevo duro, y queso rallado. Se les agrega algunos otros ingredientes dependiendo el gusto de las personas, como salsas, aguacates, crema u otros. A pesar de su nombre en El Salvador las enchiladas no tienen al chile como su ingrediente principal, aunque si se desea puede agregárseles.

Quesadilla de Elote


Ingredientes:

1/2 lb. Queso crema suave

1 taza de azúcar

2 cditas. Polvo para hornear

3 tazas de elote en grano

3 huevos

1/2 taza de harina

1 barra de margarina derretida

Ajonjolí

Licúe el elote con poca leche. Ahora bata queso crema, con 1/2 azúcar, más las yemas la harina y el polvo para hornear y luego agregue el elote ya licuado.

Bata las claras a punto de nieve y agregue el resto de azúcar. En un molde con papel encerado rocíe ajonjolí, debe hornear a 350º por 35 o 45 minutos y deje reposar unos 10 ó 15 minutos y hasta entonces saque del horno.

Violencia vs agresión

Si bien la violencia en el deporte se idealiza, condena, legitima o tolera, y en otras ocasiones se la confunde con la vehemencia competitiva, y con la firmeza con que se lucha legalmente para obtener un balón o el espacio ; a este respecto es importante definir lo que se entiende por violencia y agresión.
Según lo expuesto en las Jornada de Ciencias Aplicadas al Deporte, se considera que existe violencia cuando se coartan los derechos de una persona, mientras que considera que ha habido agresión, cuando deliberadamente se pretende causar daño físico o moral.

En la medida en que todos los deportes competitivos -especialmente los deportes de equipo- se basan en el enfrentamiento por un recurso escaso -la victoria-, es esperable que en el transcurso de los enfrentamientos se produzcan situaciones primero de coacción e intimidación, y en último extremo de violencia,
De hecho, algunos de estos deportes -como el boxeo, la lucha libre y las llamadas artes marciales- se basan específicamente en la práctica de la violencia controlada.
Naturalmente, el descontrol de los niveles de violencia en los deportes violentos, o la aparición de fenómenos de violencia en deportes considerados no violentos, constituye un problema importante en la actualidad. La obsesión por el fair-play lleva a los profesionales del deporte a sensibilizarse cada vez más frente a comportamientos violentos o superviolentos.

El tipo de conflictos que se producen en un campo de juego son cualitativamente semejantes a los que se producen en cualquier otro campo de competición, reglada o no reglada: sea entre equipos de vendedores, equipos de producción en una cadena de montaje, cuadrillas de trabajadores de la agricultura o la construcción, etc. Y ello incluye, por supuesto, los conflictos dentro de los propios equipos, que hacen que, aunque de forma menos habitual que frente a miembros de equipos rivales, se produzcan enfrentamientos -e incluso reacciones violentas dentro del propio campo- entre jugadores de un mismo equipo, o entre éstos y el entrenador/capataz.
Estamos, en suma, frente a un proceso de tensión controlada, en el que diversas estructuras de polaridad actúan sistemáticamente, provocando tensión. Y teniendo en cuenta que «los jugadores por separado y los equipos tienen objetivos, uno de los cuales es marcar goles» no es improbable el desencadenamiento de fenómenos de violencia, en cuyo desenlace influirán por otro lado las actitudes no sólo de los espectadores, sino también del líder del grupo, de las denominadas estrellas del grupo, por supuesto del entrenador, y desde luego del árbitro.

También encontramos agresión no en el juego en sí , sino en el entorno al juego, con independencia de que en la misma puedan participar, en distinta medida, los jugadores y no sólo los espectadores.

Los desórdenes con un motivo situacional responden sin embargo a detonantes como la falta de entradas, o la frustración por una derrota casi siempre interpretada como injusta por los aficionados del equipo perdedor.
En cuanto a los desórdenes inmotivados, supondrían la existencia de violencia irracional.
Pero no deja de ser cierto que a veces la celebración exaltada y alcoholizada de una victoria puede empezar festivamente, pero terminar como el rosario de la aurora si la masa festiva se encuentra con grupos que expresen rechazo a su ruidoso comportamiento, o con hinchas del equipo contrario; otras veces se trata de lo que algunos autores denominan desórdenes del tipo tiempo de descanso, estos son actos violentos que tienen lugar en fines de semana, fiestas, celebraciones, ceremonias o en cualquier ocasión especial «en que las habituales prescripciones contra la violación de normas morales se suspenden o rebajan», pasándose por alto por parte de los ciudadanos y autoridades ciertos comportamientos como las borracheras, alteraciones del orden, peleas, pequeños robos… «Todas las culturas conocen estos períodos de descanso. Y con frecuencia, el deporte suministra el pretexto para un tiempo de descanso, y desgraciadamente el relajamiento inicial de la situación puede acabar en conflicto abierto»


Por supuesto, no pocos casos que la opinión pública presenta como como enmarcados en la violencia del deporte son accidentes debidos al mal estado de las instalaciones deportivas, del mismo tipo que puede ocurrir en un colegio, un teatro o un palacio de la ópera. Pero ello no puede ocultar la existencia de graves desórdenes, y agresiones intergrupales, de proporciones crecientes. Es a estos desórdenes a los que denominamos agresión y violencia ambiental deportiva, y son los que propiamente deben ocupar a la Sociología del Deporte.

El gigante que da pasos en falso

Se lanza con bombos y platillos en enero de 2007, pero fue uno de los fracasos mas rotundos en la historia de Microsoft. El sistema operativo Windows Vista deja a los usuarios más que decepcionados. Incluso el gigante de la informática se vio obligado a reconocer el traspié y a ofrecerles a sus clientes una drástica solución: cambiar el entonces nuevo software por el Windows XP (una versión más vieja) o esperar al lanzamiento del Windows 7 para después del 2010. Todo sin ningún costo para los usuarios.


A casi dos años de aquel mal trago y a solo seis meses de que Bill Gates dejara definitivamente la empresa, un nuevo golpe vuelve a sacudir a Microsoft. Los medios especializados se hicieron eco del fallo de seguridad del Internet Explorer (IE) y salieron a advertirles a los usuarios los graves riesgos que corrían.

«Microsoft: un gran agujero de seguridad en todas las versiones del IE», explica el Washington Post.

«Alerta de seguridad del Internet Explorer: Microsoft dice que todos los usuarios están en riesgo», publica desde el Reino Unido el Daily Telegrah.

«Microsoft confirma que ninguna de las versiones de Explorer es segura», destaca ayer el diario El País de España.

«Le afecta a un mayor grupo de usuarios», apunto el sitio especializado en informática The Register.

La revista SC Magazine se anima con un titulo mas jugado: «Microsoft alienta a los usuarios a cambiarse a otros navegadores».

«Vulnerabilidad no solucionada en Internet Explorer descarga malware (virus)», explica desde su Laboratorio de Informática la empresa ESET, una de las mayores especialistas en antivirus.

Otro sitio web especializado, pero de Alemania, el Heize.de escribió: «El fallo de seguridad del Internet Explorer se expande».

El Departamento de Seguridad en Computo de la Universidad Nacional Autónoma de México reporta: «La vulnerabilidad en Internet Explorer podría permitir la ejecución remota de código».

Pero el diagnostico mas grave de este nuevo problema de seguridad lo realiza el sitio Secunia, especialistas en seguridad informática. Calificaron al fallo como «extremadamente critico».